Lectura y libertad

  • Juan Carlos Castelló Meliá

Resumen

Parte este artículo de una idea fuerza -de orden pedagógico-, de una convicción y, finalmente, de una desesperanza esperanzada. La idea fuerza a la que hacemos referencia es la afirmación heideggeriana de que «enseñar es dejar de aprender». La convicción radica en pensar que la lectura tiene el poder de crear mundos y que esta experiencia está íntimamente vinculada a la experiencia de libertad y, de este modo, es un manantial de extraordinarias posibilidades para la formación de personas (que es, en última instancia, el fin de la educación, como tantas veces dijo Mounier). La desesperanza tiene que ver con las dificultades encontradas en la práctica docente para que nuestros estudiantes acepten la invitación a leer.

Publicado
2008-04-16