La muerte y su enseñanza
Contenido principal del artículo
Resumen
Debemos educar sobre lo que al ser humano más importa. Si lo que más importa es tabú social y no se plantea con diafanidad, resulta imprescindible el desarrollo de una actividad reflexiva, cuestionadora y autocrítica sobre lo que estamos haciendo y lo que estamos construyendo. Por ejemplo, si morir es un fenómeno tan frecuente como vivir, ¿por qué lo escamoteamos? ¿Por qué se evita que el niño lo interiorice, si dese que nace, muere, y desde los tres años aproximadamente empieza a comprenderlo? La educación para la muerte se puede desarrollar desde la enseñanza, y es formativo nutrir la enseñanza con la conciende de la muerte. Objeto de este artículo es proporcionar un andamiaje para hacerlo.